domingo, 25 de septiembre de 2022

Todo esto te daré. DOLORES REDONDO. Planeta, 2016

  Este es un libro completo en el sentido de que cuida o cubre todos los aspectos que se pueden pedir en una novela. Quizás no en todos los aspectos sea una novela fuera de lo común. Pero el conjunto sí que invita a calificarla como extraordinaria. De fácil lectura, con una trama muy bien construida, una narración enfocada desde el punto de vista de uno de los personajes que desconoce quién es esa persona con la que convivía, acompañada de un medio ambiente físico y social muy bien descrito… Todo ello hace que te atrape de principio a fin. No sé si se le puede pedir más.

“Fue ella (Herminia) la que avisó a todo el pueblo, fue ella la que cuidó de su honra en un lugar en que cualquier funeral hay al menos cinco curas, y menos se considera un insulto” Pág. 200

“Allá donde mirase, un murete artesanal contenía la tierra para que no se desplomara pendiente abajo. Sobre el muro, el marrón de los troncos nudosos de las viñas. Coronándolos una fiesta de hojas verdes, brillantes, de fin de verano, entre las que era visible alguna que empezaba a tomar color rojo que indicaba que había llegado el tiempo de la cosecha (…) Llegaron a la orilla del río y avanzaron por una estrecha carretera que parecía ganada a la pared de la montaña” Pág. 230

“El dolor de la incertidumbre es corrosivo”

“Había estado horadando su interior como una incesante barrena desde el instante en que la bella sargento le comunicó dónde había muerto Álvaro. La evidencia del engaño, la burla apenas contenida en las palabras de Nogueira o de Santiago se tornaban en gotas cáusticas sobre su herida; quemando, abriéndose paso entre sus vísceras en un cruel, en un irremediable avance que iba destruyendo su esencia con su carga de vergüenza e ignominia.” Pág. 271

“Entre toda la mezquindad y el odio puro había distinguido , ya mientras la escuchaba ( a la marquesa). No, ella sabía que el odio sin más no sería, ni por asomo, tan dañino como la cruda franqueza. Solo el roce con aquella perversa sinceridad le había dejado erosiones en la piel que tardarían en sanar y un indeseable pasajero corriendo por sus venas, tan terrorífico como una posesión demoníaca, y tan real como un virus: la verdad” Pág. 321

 Regresa a casa, cásate con una chica de buena familia, y guarda las apariencias. Los matrimonios de conveniencia son algo habitual en la nobleza (…) Tú podrás seguir haciendo tus escapadas a Madrid. Álvaro se puso en pie, miró a su padre a los ojos y le contestó: “Todo esto te daré, si postrándote ante mí me adoras." Pág. 331

“Muy a menudo, tras una confesión sobreviene la vergüenza, el  arrepentimiento, no por el hecho confesado, sino porque es inevitable que sobrevuele la sospecha de habernos precipitado, de haber confiado en la persona equivocada, y de haber dejado al descubierto una parte de nuestra vida, que aun siendo una carga, mientras era secreta nos fortalecía” Pág. 366

“A pesar de toda la literatura que hay al respecto, los hijos son una decepción; la mayoría de la gente jamás lo admitirá, claro está, imagino que porque siente que en el fracaso de sus hijos reside el suyo propio” Pág. 297

“La única cosa capaz de sustraer del sufrimiento a un hombre bueno es el dolor ajeno” Pág. 437

“Y entonces había recordado… como Hansel, Álvaro había dejado para él un sendero de miguitas de pan” Pág. 454

“La certeza es alivio momentáneo, porque la verdad es siempre excesiva. Cuando llega poco a poco te acostumbras a tragarla, como la tierra gallega traga el agua que cae del cielo pero , cuando llega de pronto, la verdad acaba doliendo tanto como la peor de las mentiras.” Pág. 601