viernes, 7 de enero de 2011

Retrato de un hombre inmaduro. LUIS LANDERO. Tusquets. 2009.

“Le pondré un ejemplo acerca de la duplicidad de mi carácter. Cuando he asistido a alguna reunión de gente importante, es decir, superior a mí, yo siempre he tendido a reunirme y a hacer parte con los criados. Supongo que eso se debe a mi complejo social, y al miedo a quedar en evidencia de lo que soy, un don nadie… alimento también la secreta esperanza de darles una lección de altruismo y naturalidad a los importantes y lograr de ese modo ser alguien entre ellos, que es en el fondo mi verdadera aspiración” pág. 18


A propósito de mantener el engaño sobre su identidad a doña Catalina que había perdido a su sobrino “¿Qué mal haces con eso? Todo el que puede, y ahí tienes las religiones y las ideologías, trafica al por mayor con la esperanza” pág. 73


“Tenía una mirada modorrienta de oveja. Y no sé, me pareció que había aprendido a no poner la realidad al alcance de la nostalgia” pág. 98


Fui a su velatorio, allá por Alcorcón. Había mucha gente, el lugar era angosto, y olía a sudo, a sebo, a tabaco y a noche mal dormida.” Pág. 98


Refiriéndose al uso de las palabras Y en último extremo, ahí está la cultura china o el filósofo griego, de los que todos llevamos alguna participación, como en la lotería de Navidad…” Pág. 117


En relación a las clases en la universidad (Periodismo) “era un abejorreo continuo, entreverado de gritos a veces histéricos, de cánticos, de guitarras, de clamores, de consignas a coro, y cuando salía de aquel infierno seguía oyéndolo, y aquel ruido se me metió y alojó en el oído y allí estuvo durante más de un año, y aún hoy a veces se reaviva, quiere volver, como el latido de un antiguo dolor” pág. 119


Y ahí tiene usted cómo aquel hombre, con sus dádivas y favores no solicitados, fue adquiriendo derechos sobre mí y envolviéndome en una red de culpas, de gratitudes, de arrepentimientos, que eran en definitiva formas secretas de poder” pág. 162


Yo no sé si usted se ha dado cuenta de que hay mujeres que hacen de guapas igual que un actor puede hacer de asesino o de santo. Mujeres del montó, pero que interpretan el papel de guapas y resultan creíbles, y ya pasan a ser oficialmente guapas” pág. 178


“Yo creo que la inteligencia es como una lámpara que sólo se puede encender en toda su luz con la chispa de la intuición” pág. 222


Respecto del deterioro físico y mental “Pensé: Mala señal es ésa, ese descarnamiento que viene a descubrir a estas alturas vestigios de una juventud ya muerta. Es como cuando la memoria se demencia y los hechos de la infancia aparecen con una nitidez que sólo se logra a costa precisamente de la destrucción de los recuerdos más recientes” pág. 223


“Me dan pena los muertos. ¿y sabe? Me consuela confundirme con ellos, pasar a formar parte de la memoria de la especie, perderme en el olvido para toda la eternidad” pág. 225