No hemos estado ausente por falta de lecturas, pero no siempre se leen textos que merezcan figurar en esta lista que vamos conformando. De nuevo ha sido necesario mirar hacia atrás para encontrar una novela en la que, desde nuestro punto de vista, confluyen algunos aspectos interesantes: el contexto histórico social en que se enmarca (el interesantísimo siglo XIX), un movimiento literario que personalmente me atrae (el realismo), una temática de las grandes novelas de dicho movimiento (Bovary, Karenina, Regenta...), un estudio y perfil de los personajes (Basilio, Juliana, Sebastián, Jorge...) extraordinarios y finalmente una prosa plagada de abundantes descripciones, que en ocasiones pueden cansar, pero que tienen una calidad literaria indudable.
Describiendo
a Juliana “Tendría unos cuarenta años y era delgadísima. Sus menudas facciones,
cansadas, tenían la palidez, el tono bajo que denuncia las enfermedades del
corazón” Pág 12
"Las
nieves que en la frente se acumulan //terminan por cubrir el corazón" Pág. 37
"El
adulterio aparecía así como un deber aristocrático. La virtud parecía ser,
según lo que él contaba el defecto de los espíritus pequeños o la ocupación
vulgar de un temperamento burgués” Pág.135
Comentando
los escándalos y conductas de la aristocracia
"Falta
de religión- suspiró la estanquera
El
señor Paula se encogió de hombros:
¡Pues
por la religión es todo eso! Con los curas es con quienes más andan… ¡Con los
curas es con los que forman una cuadrilla deleznable! Pág. 150
Opinión de uno de los personajes, Leopoldina: "¡Qué
horror! ¿Hijos yo? ¡Ni hablar de ellos! Que Dios no me castigue, pero si
tuviera esa desgracia, me parece que iba corriendo a ver a la vieja del
callejón de la Paja…" Pág. 176
De Luisa: "¿Qué
era lo que la había empujado hacia él?... Ni siquiera ella lo sabía; quizá
hubiera sido tan sólo el no tener nada que hacer, la curiosidad novelesca y
morbosa de tener un amante, mil insignificantes vanidades llenas de
imaginación, cierto deseo físico… ¿Y acaso había sentido esa felicidad que,
según las novelas y las óperas producen los amores ilegítimos, esa felicidad que
hace olvidarlo todo, afrontar la muerte
y casi desearla? ¡Nunca!" Pág. 235
"Tenía
ante ella la vaga timidez respetuosa de las constituciones débiles ante los
cuerpos poderosos". Pág. 365
"La
concupiscencia le provocaba una respiración de toro." Pág. 384
Un ejemplo de la capacidad descriptiva. "El
cuarto, en el que se había encendido la luz desde hacía mucho tiempo, tenía la
frialdad deshabitada; en la pared, junto al techo, había manchas de humedad; la antigua cama con columnas
torneadas, sin dosel, y el viejo tocador del siglo pasado, con su espejo falto de azogue, presentaban, a la luz
oscilante de la vela, un aspecto triste que delataba que allí se había
extinguido la vida, la convivencia… Pág. 434
“Jorge se daba cuenta de que la
adoraba y se sentía más desdichado” Pág. 452